– Jesús Ruiz; sacerdote, agregó que la unión familiar está en crisis
-Primer domingo de marzo, día de la familia mexicana
Elena Rojas, Zamora
“Es curioso que a quienes les niegan el matrimonio a veces luchan de forma desmedida por lograrlo, porque sea reconocida su unión desde el punto de vista legal. Me refiero a los homosexuales. Y sin embargo, quienes tienen esa posibilidad de formar una familia integrada por un varón y una mujer en matrimonio muchas veces no la aprovechan”, lamentó J. Jesús Ruiz Ochoa, sacerdote del templo del Sagrado Corazón de Jesús en esta ciudad.
Agregó que esto es como cuando alguien exige un derecho, “cuando no había el derecho a votar, todos queríamos hacerlo. Ahora que lo tienen pocos lo aprovechan. Somos contradictorios. A veces las personas no saben que es lo que realmente quieren. La unión familiar se está quebrantando en la actualidad, ante la falta del valor moral”.
Recordó que precisamente ayer primer domingo del marzo se celebró el Día de la Familia Mexicana, “la familia es por excelencia, el centro de formación de una persona. De tal manera que lo que se vive y aprende en familia puede ser definitivo para toda la vida, claro que hay otras influencias posteriores, pero si en dentro de la familia se vivieron los valores humanos, sin duda es un equipaje para la vida muy grande el que lleva la persona”.
Comentó que hoy en día la desintegración familiar es una de las problemáticas más acentuadas en este núcleo, “muchas de las familias son monoparentales (formada por un sólo miembro a la cabeza). Con más frecuencia se trata de madres que han quedado solas al cuidado de sus hijos. El fenómeno de madres solteras se ha agudizado en los últimos años”.
Dijo que la desintegración familiar tiene su origen en diversos factores, los más frecuentes: “la infidelidad, el fenómeno migratorio o bien son más susceptibles a la desintegración parejas que viven en unión libre, quienes no ven al matrimonio como un sacramento que solidifique su unión”.
Mencionó que de igual forma la unión familiar se ha quebrantado por el uso excesivo de la tecnología y de las redes sociales “hay jóvenes que ni siquiera respetan la hora de la comida para convivir en familia. Cada quien está por su lado atendiendo a los mensajes que van a mandar”.
Aseveró que la familia tradicional (integrada por padre y madre unidos por lazos jurídicos y sacramentales e hijos) está siendo desplazada, “lamentablemente muchos se refieren a este modelo de manera despectiva, diciendo que es una familia anticuada. Y le llaman modelo de familia moderna a tantos tipos de familia que desde luego no convencen, tienen mucho más deficiencias, ya que al faltar la madre o el padre se genera un vacio, pues ambos se complementan, lo que se traduce en una pérdida de valores”.
Finalmente por eso consideró que las familias tradicionales “deben ser un modelo a seguir, ya que en estas sí se cultivan los valores”.
Numeraria
2 frases: “familia sana, sociedad sana” “familia con valores, sociedad con valores”.
