Elena Roas, Zamora
«Es una obligación de los patrones dar de alta a sus trabajadoras del hogar para que gocen de INFONAVIT y las 5 ramas seguridad social que son: riesgos de trabajo, enfermedad y maternidad, invalidez y vida, retiros por vejez, guarderías y prestaciones sociales», señaló Miguel Amezcua Alejo, subdelegado del IMSS en Zamora.
Indicó que el pago ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es de acuerdo a la actividad y días que trabaja la persona, así sea un sólo día, cinco o más, cubre cuotas de ese periodo. Se puede pagar de manera mensual, bimestral, semestral o anual, “según el patrón lo considere, si es una persona muy segura con ellos, si son hombres o mujeres, o se dedican a la carpintería dentro del hogar, entran muy bien dentro de este catálogo de personas trabajadoras del hogar (PTH)», explicó.
Reconoció que pocas son las amas de casa, en su calidad de patrones, las que han dado de alta ante el IMSS a sus trabajadores, probablemente por insensibilidad o también por desconocer el programa; en este momento van alrededor de poco más de 200, de los 32 municipios que abarca esta subdelegación, entre ellos: Zamora, La Piedad, Los Reyes, Sahuayo, entre otros municipios
«Es un acto de generosidad, dar de alta a las personas que durante toda la vida se han dedicado a atender y a cuidar las actividades del hogar y que al tiempo terminaban solas, inclusive sin familia, en completa indefensión y ni quien las volteara a ver. Es uno de los programas más nobles del IMSS y en verdad vale hacer justicia a esas personas que se entregan en cuerpo y alma y que inclusive se hacen parte de tu familia».
Consideró que hay trabajadoras que prácticamente viven en el hogar de los patrones y se vuelven parte de esa familia, “entonces, de esa manera les aseguran una pensión para un retiro de su vida futura, con cierta dignidad para poder vivir en mejores condiciones, ya la última etapa de su vida».
A pregunta expresa, dijo que el trámite es amigable, “la página para dar de alta es accesible y entendible, lo pueden hacer desde la comodidad de su hogar, es muy loable y considerable, pues solo pagan los días que corresponde, no es complicado. O bien, muchos no las dan de alta, porque no son muy estables, trabajan un tiempo y se van al campo, o trabajan en otras casas, un día no van, pero eso no las exime de un riesgo de trabajo: se puedan caer de las escaleras, resbalar, etc., y eso lo debe absorber el patrón».
