José Guerra, Venustiano Carranza
Pese a que existen leyes y reglamentos que impiden la participación de los menores en actividades laborales, en algunas zonas de labranza los infantes constituyen una gran parte de esta fuerza laboral.
De manera concreta en cultivos ubicados a bordo de la carretera estatal que conecta a las localidades de El Fortín y Cumuatillo de este municipio fueron ubicados cerca de una veintena de niños y niñas de entre 5 y 8 años en labores de recolección de jitomate.
Cuestionado al respecto uno de los capataces señaló que los niños no trabajaban sino que acompañaban a sus padres en esta recolección del fruto por el que recibían un salario de 150 pesos cada uno por cada tráiler cargado de la hortaliza.
Las familias, de acuerdo al entrevistado provienen de la región de Yurécuaro Michoacán pero se integran también contingentes de Guerrero y de Oaxaca quienes laboran a pleno rayo de sol en compañía de los niños.
Cuestionados sobre este tema las autoridades ejidales ha señalado que en reiteradas ocasiones se ha llamado a los productores a evitar la contratación de cuadrillas de trabajo en las que se detecte la presencia de los menores de edad, sin embargo señalaron, las cuadrillas se contratan directamente con el comprador de la cosecha en sus lugares de origen.
De acuerdo a algunos de los trabajadores consultados, se incluye a los niños en el trabajo ya que si bien reciben 150 pesos por llenar un tráiler, la participación de los niños en la recolección les permite acelerar su ritmo de trabajo.
Es de destacar que no esta la primera vez que se detecta la presencia de menores cubriendo jornadas laborales en zonas agrícolas, hace unos meses se dio a conocer también la contratación de menores para la cosecha de fresa en la región de La Luz del municipio de Pajacuarán.